Viajar en furgoneta camper te permite tener cientos de experiencias diferentes dependiendo del destino, actividades a realizar, época del año y de la compañía. Pero hay unos cuantas cosas y consejos que podríamos considerar básicos y comunes a todas ellas. La experiencia es un grado, pero imaginar qué es lo que vas a hacer, las actividades que vas a llevar a cabo pueden darte algunas pistas sobre lo que puedes necesitar. No obstante, aquí te dejo unas claves que a buen seguro te resultarán de ayuda y espero, de paso, te resuelvan alguna duda.
Voy a comenzar con algo que a mi juicio es indispensable llevar, aunque deseamos no utilizar: los medicamentos y un pequeño botiquín. Tiritas, alguna gasa, el polivalente esparadrapo y algún desinfectante tipo Betadine, resultan muy útiles para pequeños cortes o roces. También aconsejo llevar unas pocas unidades de los medicamentos y pomadas más habituales. No en todos los países el acceso a medicinas básicas es tan fácil como ir a una farmacia, además de evitarnos la complejidad de describir los síntomas en otro idioma.
En este apartado incluiré los repelentes de mosquitos y la crema solar. Aunque son productos que se encuentran en cualquier sitio, especialmente en los destinos vacacionales, prefiero llevarlos conmigo y a mano porque pueden ser necesarios al poco de iniciar el viaje.
“No olvides la crema solar y repelentes de mosquitos.”
Otro tema controvertido es el menaje. Seguro que, para muchos, parte importante del viaje es la gastronomía de los lugares que vamos a visitar. Tanto si vamos a cocinar, como comprar algo preparado para degustar en la furgo, o solamente vamos a hacer un picoteo o merienda, hay algunos objetos que no podemos olvidar.
Equipamos nuestras furgonetas camper con el menaje necesario además de aquello que tienden a olvidarse y puede dar al traste con la idea de una idílica comida en nuestro oasis favorito. Abrelatas, imprescindible si viajas a Francia, por ejemplo, o sacacorchos, son cosas que toda persona amante de la comida puede necesitar. Añadiría también una navaja multiusos que nos puede sacar de más de un apuro y puedes llevar también a las excursiones.
Al disponer de nevera con compresor, las posibilidades se multiplican y permiten, además, disponer de bebida fresquita, tan gratificante después de un día de playa, una caminata por el campo o una jornada típicamente urbanita.
Aunque la cocina está integrada, personalmente y en especial en primavera y verano, no puedo pasar sin una cocina portátil. Son de fácil uso y te dan la posibilidad de cocinar al aire libre. En mis vacaciones aprovecho para hacer alguna barbacoa, algo que echas de menos cuando vives en un piso.
En cuanto a la ropa, daría para varias entradas en el blog, pero como se trata de comentar los imprescindibles, aquí van unas pinceladas. Antes de nada, piensa que, si te has decidido por un viaje en furgo, es porque quieres vivir la experiencia de “menos es más”. Personalmente, una de las cosas que más disfruto es saber que puedo pasar mis vacaciones con un pequeño equipaje y no echar nada de menos. Para ello, primero de todo, hay que olvidar los “por si acaso”. Ocupan mucho espacio y no los vas a necesitar. Opta por prendas versátiles y de fácil secado. Salvo que la totalidad del viaje lo realices por zonas cálidas, lo más probable es que necesites alguna prenda de abrigo. Personalmente las camisetas térmicas, chaquetas finas que se pueden guardar en su propia funda, resultan de gran utilidad.
Dentro de la ropa y complementos, como imprescindibles incluiría unas chanclas, escarpines si vas a hacer ruta de playas y calas; gorra o similar, una mochila o bolsa y algún envase para llevar agua. Para la noche, a buen seguro necesitarás una mantita.
Sin una clasificación única, objetos que no podemos olvidar son una linterna y una cuerda y pinzas. No puedo imaginar viajar en furgo sin una mesa de camping y unas sillas, no te preocupes, lo encontrarás incluido en el equipamiento básico. Aunque disponemos del toldo, añadiría también una sombrilla y una esterilla de playa, que es otro objeto multifunción que no pesa y apenas ocupa espacio.
El apartado de “gadgets” y elementos electrónicos varios, también dependerá mucho del tipo de viaje. No podemos olvidar un cargador de móvil/tablet, un alargador (que se incluye en la furgo). Imprescindible también disponer de un adaptador si viajamos a otros países. El tema GPS es algo controvertido y hay opiniones de todo tipo. Si es suficiente el GPS del móvil o si empleamos un Tom Tom depende mucho del usuario, pero aconsejaría este último para programar adecuadamente el viaje en épocas vacacionales debido a que puede ser que necesitemos tener varias alternativas al haber lugares que pueden encontrarse completos. Si disponemos de algún mapa de carreteras, también podemos llevar uno, éstos no fallan, pero hay que evitarlos si están desfasados. Volviendo a lo digital, tener controladas algunas webs y descargar alguna App sobre lugares para dormir, planificación de rutas y viajes pueden resultar de gran ayuda.
En el mercado hay multitud de objetos que, sin ser imprescindibles, nos pueden ayudar a disfrutar, más si cabe, de nuestra experiencia en la furgoneta camper. Aunque en verano se eviten las zonas más cálidas, nos puede venir muy bien un ventilador con conexión USB. Si, por ejemplo, viajamos con nuestras amadas mascotas, un aspirador de mechero nos ayudará a mantener nuestro oasis libre de pelos.
Por último, cosillas que, si bien no todo el mundo necesita, personalmente yo los considero, a todas luces, imprescindibles. En vacaciones me gusta dejar de lado el móvil, más bien, disfruto tanto de otras cosas que lo encuentro como un elemento perturbador. No así la música. No puedo pasar sin ella y suelo descargar algún disco, instalar alguna aplicación y algún podcast para escuchar durante la conducción, especialmente por el extranjero. No me consideraría una adicta a las series, pero llevar algún capítulo descargado para ver en la table, puede ser un buen plan para aquella jornada lluviosa.
A grandes rasgos diría que ya está todo, pero es posible que a lo largo del viaje surja algún elemento que nos lleve a la improvisación. Pero no te preocupes, estos detalles son los que hacen del viaje una experiencia aún más enriquecedora. Ya sólo te falta la furgo y ¡a disfrutar!